Budweiser está en el ruedo otra vez. Ahora continúa con la saga de pedir la cerveza con un gesto. Primero decidieron reemplazar las palabras «dame una Budweiser» por cualquiera otras tres palabras.

Ahora utilizando el humor como camino creativo muestran la confusión que generan gestos poco claros.

El del noticiero se «confunde» cuando le dicen que «estire»

Bud sabe lo que se necesita para llegar a los argentinos y va a pelear por ello aunque le tome 20 años.

Era evidente que Pepsico no se iba a quedar cruzado de brazos luego del lanzamiento de Powerade por parte de Coca Cola.

El retador más importante de la industria atacó a Coca Cola con altura. Lo hizo a través de su nueva campaña de Gatorade, cuyo slogan dice: «Con parecerse no alcanza».

De esta manera, Pepsico rompe una regla del marketing que dice que los líderes de mercado no atacan de manera frontal a sus perseguidores. Pero Gatorade es tan grande dentro de su categoría, que puede darse ese lujo.

Ahora Coca-Cola estará obligada a responder -y rápido- ya que si Gatorade establece una posición «diferente», será prácticamente imposible de alcanzar.

El mercado no ha cambiado mucho. Apenas si Powerade pudo establecer una posición.

Ahora es el momento de disfrutar como consumidores de una lucha eterna -mientras duren en el mercado- de promociones.

Bienvenida la pelea

Hace un mes que está entre nosotros Powerade, la bebida que Coca Cola Company desarrolló para pelearle el liderazgo a Gatorade.
Después del fracaso de Dasani (y no gracias a los mail) Coca Cola decide apostar por la bebida correcta. Powerade tiene algo que Dasani no posee: branding.
Gatorade estuvo hasta ahora en una clara posición de líder, pero siempre ejerciendo influencia en los consumidores en el punto de venta.
Powerade utiliza una estrategia de penetración en el mercado (la más acertada a mi criterio) a través de precios bajos. Powerade trata de captar a los switchers. Sabemos que los trials salieron corriendo ni bien estuvo la bebida en el mercado. Pero ¿Será suficiente?

Gatorade realizó acuerdos con las dos cadenas de gimnasios más grandes del país, para que dentro de los gimnasios sólo se venda Gatorade.

Cómo será el futuro es algo que nadie puede aventurar. Sin embargo Coca Cola tiene una empresa difícil, ya que tratar de desbarrancar a un líder no es tarea sencilla… y que lo diga Coca Cola.

Cada vez resulta más evidente que la tierra que nos tocó habitar no es la deseada; y no me refiero sólo a las personas que toman como decisión irse de nuestro país. Me refiero a que no somos capaces de cuidar y respetar lo que nos rodea.

Si como muestra basta un botón, aquí va:

Quienes vieron las imágenes de la semana posterior al domingo de Pascuas comprenderán lo que aquí se escribe. No hablamos de política, no hablamos de quién es más que quién en un conflicto. Me refiero a la intolerancia ejercida por distintos grupos. Ver personas dar vuelta una camioneta de otra sólo por el hecho de no ser igual. Ver personas tirar un elemento destructivo a la ruta para que los vehículos no puedan avanzar. Pintar paredes ajenas con consignas a favor de unos y en contra de otros cuando nadie les dio permiso.

Asistimos a ver un país que no queremos. No queremos que haya diferencias, cuando siempre las hubo. No queremos que unos u otros se expresen, cuando es un derecho constitucional. No queremos que los trabajadores reclamen lo que les corresponde sólo por el hecho que un organismo estatal controlado (me refiero al INDEC) no anuncia que los precios subieron lo que en realidad subieron, cuando es un derecho de los trabajadores.

Podría seguir con la lista pero en vez de eso les hago una pregunta ¿Qué país queremos?

Yo respondo por mí:

Yo quiero un país con gente que tolere las diferencias.

Yo quiero un país con un gobierno que bregue por los que menos tienen. Que brinde Educación, Seguridad, Salud, y que respete al ciudadano.

Yo quiero un país donde ir a pasear sea lo normal, no el encierro.

Yo quiero un país que me deje elegir mi manera de vivir y que esa elección sea lo que me guíe en la vida sin importarles a los demás.

Ustedes pueden decir que soy un soñador ¿Y quién no?. Que creo en las utopías ¿Qué nos guía sino?. Pero lo que sí me parece importante es generar una chispa que luego se convierta en llama.

¿EMPEZAMOS?

Una de las escenas más recordadas de la película «El Padrino» para este comercial de Audi.

Te puede gustar o no Pepsi, pero es innegable que la creatividad de esta compañía es muy alta.

Coca Cola y un duelo de GIGANTES.

Otra de Pepsi, desarrollada para promover su red de inclusión de personas con habilidades diferentes.

Budweiser y su creatividad no tienen límites.

Fedex y una manera más cómoda de enviar sus paquetes.

Budweiser y otra copia de película, esta vez «Rocky».

Al igual que cuando se utilizan gafas (de sol o con aumento), sólo vemos una parte del total cada vez que enfocamos nuestra atención hacia algo.

En publicidad, más allá de si nos gusta o no un comercial, tendemos a recortar lo que vemos según nuestros paradigmas. El gusto o no por un comercial está siempre supeditado a nuestros pensamientos, nuestra visión y nuestro parecer. En un mundo globalizado, lo importante es saber elegir (esa parece ser la consigna); vaya paradoja,la globalización debería traer un mundo más armónico y parejo en la forma de ver y pensar. Hoy en día el marketing se rige por la microsegmentación (pequeños grupos de personas con gustos, economía, aspectos psicológicos, hábitos y costumbres similares). Es decir que igualamos para diferenciar.

¿Que ves en una foto? ¿El personaje principal? ¿El fondo? ¿Un paisaje? ¿Qué parte? La tarea actual de las empresas es llegar de la mejor manera a sus consumidores y clientes; pero además generar una recordación de marca, una identidad marcaria, transmitir valores y por sobre todas las cosas generar ventas.

Seguimos viendo una sola parte o ….. ¿Empezamos a abarcar el todo?